jueves, 27 de septiembre de 2012
martes, 25 de septiembre de 2012
lunes, 24 de septiembre de 2012
La Feria
Días de feria en época de lluvias. Hay un
rincón para la ilusión de la
inocencia. A su circunferencia sigue caminando el mundo voraz e inescrupuloso,
quizás un monstruo, pero esta vez va herido de sonrisas, de primeros besos y
los atardeceres de octubre. Se abren los poros al calor de la mañana que va
convirtiéndose en día y que con el transcurrir de las horas amenaza con lluvia.
Pero no llueve, o llueve muy poco.
Ruedas de la fortuna, el carrusel, las sillas voladoras y
las golosinas. Los bares y comedores que se improvisan sobre la vía
publica en donde la gente sale, sonríe y
toma algunas cervezas. Algunos se pasan de copas y terminan en pleitos, o
suspirando por un amor del ayer. Otros gritan bailan y se enamoran. La música y
los sonidos de las maquinas tragamonedas, entremezclados con lociones
baratas y frituras de harina.
-“¡El borracho!” ¡Compre su cartón! ¡La chalupa! ¡pruebe su suerte! ¡El corazón!
-¡Lotería! grita el hombre que gana una
moderna vajilla y que mas tarde se
emborrachará hasta embrutecerse, embarcándose en el hechizo oscuro de algún perfume de mujer , para terminar
crucificado en el asfalto , clavado por los rayos de sol de medio día mientras
un niño brinca en un solo pie
sobre uno de sus brazos.
Primavera Estelar
Un flor que estaba enferma
un amor parcial
un vacío existencial
Donde hay uno de los dos que no se quiere
se vive un idilio enfermo
Un sol que no vio la luz
Donde siempre fue de invierno
y no llego la primavera
Mis flores buscan tierra fértil
Manos amorosas, besos de poesía
yo ya sembré mis semillas
y estas solo buscan lluvia de estrellas
Busco una ley
una medalla
tesoro mistico de lo divino
quiero un verso constructivo
quiero toda una canción
un concierto de astros para llenar este vacio
muchos soles y estrellas
una galaxia
un paraíso de luz
Hay un cántaro que se rompió
se esparció la podredumbre
de donde surge victorioso
un fénix
nace una estrella
así nace una estrella
y aquí nace una estrella
en primavera estelar
lunes, 17 de septiembre de 2012
Así nació un Fenix
Érase una ves un hombre que paseaba su mirada en los escombros. Cuenta la historia que después de desbordar las copas se encontró con un espejo roto. Los fragmentos del cristal le partían el rostro a pedazos. Un día el hombre se canso de tanta embriaguez y decidió buscar el origen de sus problemas. Después de un gran túnel se encontró a si mismo. En el fondo del abismo se encontraban los cadáveres de sus antiguos yo, uno a uno, con todas las armaduras y yelmos posibles. Los había vencido a todos con una mirada al penetrar la oscuridad con su luz. Nunca volvería a ser el mismo. Antes del atardecer su casa estaba en llamas y de las cenizas nacía un fénix.
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